sábado, 25 de mayo de 2024

 

ESCRITURA



Te desnudo con poemas,

te acaricio con escritos,

te muerdo con los párrafos,

nos amamos entre líneas,

sintiendo lujuria de un texto

y deseamos todo lo escrito.

Muero por pensarte desgarrando mis instintos.

Te cobijo de amor con mis deseos llorando.

Llorando en la desesperación

con la literatura placentera.

Narrando tus manos en mi cuerpo

y acariciando mi piel, deseándome

como en el primer renglón de este escrito.

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor              D/R

derechos reservados

viernes, 24 de mayo de 2024

 

LA ESCUELA

 


En un momento me encontré solo, con una señora que  nada hacía pensar que dos desconocidos  tenían que decirse algo o comentar algo en una reunión de colegio. Ella de ojos claros, de una mirada sensual, con su ropa ajustada al cuerpo, como dibujado por un artista, marcaban sus piernas carnosas pero perfectas, su piel trigueña y sus pechos orgullosos de mostrarse. El pelo negro a la cintura, sus labios pintados de rojo carmesí, me hicieron pensar en las fantasías de sus deseos. Todo parecía normal, pero  al momento me di cuenta que estábamos esperando en un punto equivocado, nadie se veía por el patio y nosotros  dos  en un aula alejados de la entrada y de la dirección de la escuela. Con timidez y una sonrisa delicada, le dije…– Disculpa… ¿es aquí la reunión?  Me respondió…- No lo sé, pero no tengo miedo si estoy acompañada, ¿Y vos? ¿No tenés miedo?... Sin pensar nada, enseguida y por inercia respondí…-No, no, porque estoy bien acompañado… Y los dos reímos juntos. El sector oscurecía y ninguno dejó o intentó salir, no  decíamos nada y sin querer, de a ratos nos mirábamos y nos reíamos como dos adolescentes cómplices de algo y no saber porque. Pasó un tiempo no muy largo y el silencio, era  acompañado por el ruido de sus tacos, que iban y venían, hacia la puerta. Se paró de golpe, me miró fijamente, y muy sensual preguntó…- ¿Eres casado?... y sorprendido casi tartamudeando le respondí…-No, si, sí, ¿soy casado y vos?... Volvió a sonreír y me dijo…- También, pero solo aparentamos… ¿Quieres a tu esposa? Y esa pregunta condicionaba mi respuesta por un motivo o por el otro, y jugando la intención dije… -Sí, pero a veces me gusta lo prohibido. No sé qué pasó, como fue, en qué segundo del momento ocurrió, esta bella mujer, estaba parada frente a mí, casi tocando su cuerpo con el mío. Miró mis labios como recorriéndolos, y los suyos mojaron los míos con un beso apasionado interminable. La tomé de la cintura, y sentí que su lengua pedía permiso en mi boca, mis manos  acariciaban sus caderas y ella, respirando muy profundo se alejó de mí, retrocediendo muy despacio llegó a la puerta, y la vuelta de llaves me invitó a todo. Lentamente fue despojándose de la ropa, y su increíble cuerpo estaba ante mí. Llevó su mano  entre sus piernas y muy suavemente me mostró que estaban humedecidas, volvió acercarse muy mansamente, tomó mi mano, mojó mis dedos en su boca y los llevó a su venus. Sus parpados apretados y su boca entreabierta de la sensación que sentía por el vaivén que ella agitaba. Tomó mi cabeza por mis cabellos, y como un zarpazo de pantera, puso mi boca entre los labios de su vagina. Todo besé y todo saboreé, el perfume de su piel en sus nalgas y lo húmedo de lo que ella me daba. Al momento sentí una extraña sensación, cuando mi pantalón, ella lo había bajado con desesperación arrodillada ante mí y gimiendo como una hembra salvaje. Su mano en mis nalgas apretándolas con descontrol, mientras sus labios, acariciaban mí pene, cuando todo lo hacía en su boca. Me pidió, que la haga mía, me imploró lujuria, se sentó sobre mí, y comenzó a cabalgar para ganar el premio de esa locura de amor. Retorcía su cintura de atrás para adelante, tomó lo mío con su mano porque lo quiso por atrás, y los dos desencajados, gritamos sintiendo mi semen dentro de ella y ella mojándome por terminar con un gran placer.

 

 

Orlando Mario Soverchia-YoAmor           D/R

Derechos reservados

jueves, 23 de mayo de 2024

 

MENTIRA Y PESARES



 


Nunca te tuve en mis brazos,

ni tampoco en mi vida.

Quisiera ser tu ficción hecha realidad,

y que mi biografía no fuese crueldad.

Que seas parte de mi existencia,

sin angustia y con verdades de amor.

Todo es un clamor de sentimientos

y exclamación de pensamientos.

Reniego de lo que es mi querer incompleto,

Y glorifico mi corazón por concebir lo que siento.

Llanto en mis ojos, gritan mi codicia a tu alma,

Labios temblorosos por especular con tus besos,

Y todo es un susurrar de imaginación,

Con mis mentiras y los pesares de pasión.

 

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

 

martes, 21 de mayo de 2024

 

TU TARDE


 

Esta tarde dulce y tierna, es tu tarde.

Es el momento que yo extraño,

es el movimiento de mi alma que no puedo sacar de mi mente.

Quiero olvidar y pensar que no me ocurre,

que es solo imaginación de los caprichosos sentimientos,

pero el dolor de no verte,

no sentir tu silencio a mi lado,

me hace tonto y frágil a mis sentidos.

Como hago para enfrentar el día sin tu voz,

sin el color de tu imagen,

y no sentirme débil a los deseos de llorar.

Te quiero y te amo tanto… que el corazón

se siente pequeño de tanta ansiedad.

Nadie distrae mis emociones

y las pasiones que he vivido contigo.

Todo es vulgar, complejo y asfixiante con torbellinos de locura.

Siento perderme en la simpleza del querer

y en la complejidad del amor.

Siento que esta tarde que es tuya,

es dueña del amor que tengo contigo.

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

Derechos reservados

martes, 7 de mayo de 2024

 

TU PLACER Y EL MIO



Abracé tu placer y tú los míos

Mojaste mis labios y yo los tuyos

Rosé tu cuerpo junto al mío

Mis ojos fijos muy cerca a los tuyos.

 

Negando que no eres del todo mía

Me hice dueño de todas carisias

Tu vos muy suave a mi oído decía

Que ya era tuyo y vos eras mía.

 

Besé tu piel sin tener final

Recorrí todas las partes, de ese manjar

Dominante tú zigzaguear

Para que todo, se deje extraviar.

 

Mis manos muy fuertes, apretaban las tuyas

Decían lo hermoso lo que me brindabas

Junté más deseos en ese lugar

Lecho que fue, volver a soñar.

 

Tu pelo, el marco de aquella carita

Gestos movidos, para no despertar

Cerrando tus ojos, tu boca entreabierta

Dejaban caer suspiros, de aquella ofrenda

 

Tus manos, mezclaban mi pelo

Murmuraba tu nombre y tú el mío

Sentía muy  suave todo lo tuyo

Mojados los cuerpos, eran solo uno

 

Delirios revueltos con muchos quejidos

Tu cintura, danzaba entre mis brazos,

Vaivenes, de los cuerpos juntos

Caricias y más caricias, pertenecían a los dos

 

Llegaba el final, que no queríamos

Mire tu cuerpo envuelto en calor

Reposé mis manos en tu pecho

Y solo fue decir, tu placer y el mío.

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

lunes, 6 de mayo de 2024

 

VEN

 


Ven, bella mujer, ven.

Ven solo unos minutos,

con tu ilusión de niña adolescente.

De amor intenso y ternura penetrante

 incrustada en tu belleza.

Ven, quiero decirte que te amo...

Y te daré mi virgen amor…

Ven, porque deseo que estés en mi corazón.

Tu imagen de inocencia,

lleva mis pecados a instintos incontrolables.

Ven, solo necesito sentirte a mi lado,

y delinear la pasión que tienes en tu cuerpo.

No me digas que no, solo ven…

Porque el delirio de tu belleza,

manipula mis sentidos, provocando mis deseos.

Codicia tortuosa para mis sentimientos,

pero celestial para mi alma.

 

 Orlando Mario Soverchia- YoAmor

viernes, 19 de abril de 2024

 

Atardecer...

 


Estoy erguido y desolado, ante este día mutilado,

No sabiendo que hacer o donde volcar mis penas.

Siento mi alma solitaria y extraviada,

Mirando nada y todo, recuesto mis pensamientos.

Descansa la imaginación en la lejanía de un horizonte apacible,

Me relajo mansamente confesando sentimientos magros.

Mi mente recorre el pasado y mi corazón extraña lo amado.

Se entrecorta la mirada entre árboles remolones,

Danzando suavemente por los mimos de una tenue brisa.

Los pájaros cantan sus sentimientos,

Trayéndome a mí aquellos momentos.

El crepúsculo acariciando el final,

Dejándome solo y abandonado.

Grito mi silencio y nadie lo escucha,

Canto mi tristeza aburriendo la audiencia.

Lentos y perezosos corretean mis sueños

Recostados en vagas esperanzas.

Sintiéndome dueño de amantes nostalgias.

Juegan mis fantasías en aquella lejanía,

Revolcando angustias en una bruma de suave llovizna.

El día termina, dando vueltas en mi destino evoco lo vivido.

Eludo el presente y alejo el futuro,

Cuando acongojo a este atardecer injusto.

Deseo ser libre en la penumbra de esta tarde envejecida,

Y sentir en mi rostro caricias de un creciente día.

Los deseos y vergüenzas se abrazan sin razonar,

Cuando el delirio de mi imaginación cae rendido

En este atormentado atardecer pasional.

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

 

DESENCANTO


 

No he buscado el amor,

primero busqué ese alguien donde me podía encontrar y después me amara.

Las experiencias en mi vida me enseñaron a crecer, pero también a sufrir.

Sin embargo, me bastó solo unos instantes, en darme cuenta,

cuanto tiempo he amado para nada.

 

En la vida todo puede suceder y nada está dicho.

Esa mujer díó muchas vueltas y cuando creí que todo estaba perdido,

es cuando encontré lo que pensé terminado.

Germinó mi alma, floreció mi corazón, y mi mente fue regada de querer.

 

Me llamaba. - Mi amor - me decía. - Te quiero -

Le sonreía y solo respondía - como yo mi cielo -

Cuanto la extrañaba cuando necesitaba estar bien...

 le regalé algo muy barato y simple, un beso y un té adoro.

 

Acompañé su caminar, mis manos en su cintura,

sentí que era toda mía, la solté por un instante y se fue de mi lado.

Destinos distintos, pensamientos desiguales, formas de vida discordantes

marcaron las distancias, modelaron actitudes y estrujaron el dolor experimentado.

 

Necesito entender los actos de la vida en mi propia obra teatral,

porque el destino, escribió este cruel guion para mi desdicha.

Mi alma y mi corazón no tienen nada... todo es una pantalla,

y siguen en su soledad con el remanso de mi nostalgia.

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

miércoles, 3 de abril de 2024

 

                                        DESPEDIDA

 


Me despido… Es la sensación de partir, porque siempre parto.

Es el momento que me retiro, me alejo, me evaporo en el presente,

con una mirada, una sonrisa, un gesto serio o una expresión desencajada.

Con un apretón de mano, un beso, un abrazo o una postura adversa. 

Cuando mi figura se pierde al cerrar la puerta,

al salir del lugar, al doblar la esquina,

o en la distancia, como un punto que se esfuma en el horizonte.

Mi despedida, es el final donde y con quien me hallo,  

o desaparecer del lugar que me encuentro.

Abandono el momento actual, es la historia de mi vida,

son recuerdos de nostalgias, de sentimientos repartidos,

maltrechos de alegrías y tristezas, que hacen mi existencia.

Me despido de uno o de todos, quedando satisfacciones,

o desconsuelos por lo que he transitado, o manifestado, pero me voy.

Ya no quiero estar, ya no me interesa existir en mi actualidad.

Solo quiero despedirme del pasado, un nuevo mundo es lo que veo.

Por eso quiero que este momento, sea la despedida de mi realidad.

 

  

                       Orlando Mario Soverchia- YoAmor  

 

DESTINO

 


En un primer momento me acerque a ti

para conocer una nueva mujer.

Tu imagen me atrajo, quise explorar lo que esos ojos color miel

 transparentes podrían mostrar,

y sentí que me llamaban para decirme que algo tenían para mí.

Tu belleza llegaba a mi mente y mi conciencia,

necesitaba de ella para serenar mi incertidumbre.

Entre a tu mundo sin pedir permiso,

sin dejarte a elegir, comencé a dirigir tus emociones

y con celos, a seleccionarlos.

me sentía con derecho de tu alma,

de tus sentimientos, de tu destino, porque así lo puedo ver

y me gusta cuidar de ellos.

Estoy destinando mi tiempo,

acreditando lo que siente el corazón,

                                     consumiendo mis horas de vida,

 sembrando la semilla de mis sentimientos.

Estoy transitando este túnel

y llegar a la pasión de lo que tú me darás. 

Porque ya he destinado mi vida a morir a tu lado,

sin importar cuanto tú me vas amar.

 

 

Orlando Mario Soverchia - YoAmor

lunes, 1 de abril de 2024

 

AMOR POR DESPRECIO



                                          Estoy acostado, estoy mirando hacia el techo de mi mundo

Quedan mis brazos atrás de mi cabeza.

Deseo pensarte, necesito acordarme de vos.

Mutilo los recuerdos de tanto dolor,

 y sin embargo te tengo en mi mente.

Quiero tu imagen desnuda de toda sensación.

Frustrada por tu ignorancia.

Extraño tus manos que me acariciaron el alma,

con tus palabras perversas de sentimientos falsos.

Añoro tus gestos fríos cuando te dirigías a mí.

Tengo en mi vida pasada, el amor que yo sentía  

y el desprecio que tú me dabas.

 

Orlando Mario Soverchia-Yo amor     

miércoles, 27 de marzo de 2024

 

Abrázame ahora, hazme sentir tu cuerpo en este instante, porque necesito tu calor, y el refugio de tu ternura. Te necesito.
Te representaría cánticos, te recitaría poemas, te escribiría cartas de amor, pero prefiero decirte dos palabras: te quiero.
Un fuego de amor que paraliza mis sentidos, que me impide más que amarte, un fuego de sentirte, que me hace pertenecerte
Sentir tus labios en medio de la soledad, de tu soledad tan dichosa, de tu mirada enamorada, de tus caricias llenas de ternura, de tu mundo inmóvil por amor, de tu ternura generosa, de tu dulce despertar... Pero ámame.



martes, 26 de marzo de 2024

                                                       CERRANDO LOS OJOS


 

Cerraste los ojos por no ver tu pasado,

por no querer mirar aquel que dijo hacerte el amor,

y solo saciaba instintos , golpeando tu existencia.

Cerraste los ojos cuando llegó ese hombre clandestino,

pensando que era él, para tu destino.

Mendigaste un amor y mucho cariño,

prestando tu cuerpo y calmar sus deseos prohibidos.

 Como aquel que se acercó a ti con promesas de compañero fiel,

 de sentimientos puros y sinceros,

y solo fuiste una más de todas sus mentiras.

Por eso cuando tienes a alguien junto a tu cuerpo,

y reclama pasión a tu alma con placeres contenidos.

Y cierras tus ojos para no ver, como la vida te exige, lo que tú no sientes.

 

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor

lunes, 25 de marzo de 2024

AGONÍA



El frío abraza mi alma, el cuerpo se abriga de pesares,

el corazón se acobija de sentimientos

y los sentidos calientan mi razón,

 instantes que aparecen como una eternidad.

Los recuerdos y las nostalgias de un amor,

se presentan inmóviles, quietos ante mí,

sin figura ni contorno, solo la tenue imagen de lo que fue

y el tallado profundo de lo que quiero olvidar.

Son las cuatro estaciones de mi vida,

y los colores del dolor y las alegrías.

Mi tormento no es el pasado ni el presente,

mi agonía, es por lo que sentiré en el futuro,

sin tu amor y sin tu presencia.

 

 

Orlando Mario Soverchia- YoAmor