DECLARACION
Muchas cosas un
hombre puede hablarle a una mujer, contarles vivencias perdidas de su propia
vida, mentirle de cualidades falsas o proyectos imposibles, para construir
ilusiones que jamás se concretarán. Lo que sí estoy seguro, que todo lo que vos
puedas creerme o quieras aceptar, es lo que yo tengo en mi mente, es lo que
siento en mi corazón y grita mi alma.
Olvidarte muchas
veces se cruzó por mi mente, pero es más
difícil que encontrar el sol en una noche de estrellas, siento soledad al
pensar que no te puedo escuchar y no te puedo observar, saber de ti a cada
momento, donde estás o cómo estás. Sentir la necesidad de encontrar en la
madrugada tu cuerpo junto al mío, oler tu piel de mujer amada y sacudir mis
lágrimas por imaginar el placer de haberte amado con locura. Locuras de amor
que se posaron en tu belleza jugando como un niño atormentado por el deseo de
lo prohibido, sin importar cuales son nuestras culpas y flotar entre perfumes
de hermosos rosales, amarte como te amo,
no es tu culpa la que lastima,
sino la pasión que encuentro en ti cuando me miras.
Cuánto hay de vos que me deja inquieto, cuanto necesito de vos que no lo
merezco, pero todo eso que parece tuyo,
sin saber lo que has logrado, creaste en mí una realidad de un amor
imposible y prohibido, de un sentimiento loco pero puro, de un deseo
incomprendido pero sincero. Quisiera que nunca estés triste, que las lágrimas
ya no mojen tus ojos hermosos, que tus
carnosos labios estén siempre sonrientes y
tu alegre mirada, reciban con
agrado una flor de mi mano.
Desearía regalarte
la luna, el sol, las estrellas, y hagas de ellos tu propio universo, así podrás sacar de ti lo mejor de tus
sueños.
Sin querer sos la culpable de lo que causaste en mí,
un hermoso estado emocional que hace de
mí, un ser vivo y cruel, al tener en mi
mente esa hermosa mujer, bella criatura, tierna y apreciada figura que llegó a
mí para no poder irse jamás.
Quiero regalarte
algo de mí, aunque no llegue a ti, daré
todo por ti si todo es para ti, dejaría
todo por vos, si la miseria y la soledad
fuese tu amor, porque te llevo en mi piel como un dulce perfume
impregnado en mi alma, todo lo que
siento, todo lo que pienso, todo lo que
tengo es poco para tanta grandeza, para tanta belleza. Y esto es poco pero
todo... todo... es por vos. Nunca imaginé que este amor que siento, este amor
que desborda mi forma de ser, este amor que no me deja tener orgullo ni sentir
la humillación, este amor que me enceguece hasta hacerme un ser lisiado, no lo
pueda compartir contigo.
No tienes culpa de
nada ni por nadie, tu única culpa es existir, estar en algún lugar del mundo,
respirar, reír, llorar, hablar y lo más hermoso de todo, amar.
Aunque no lo
creas, no lo quieras, no lo sientas, todo lo que tengo, todo lo que siento es simplemente
AMOR PARA MI AMOR...
Orlando
Mario Soverchia- YoAmor