jueves, 16 de septiembre de 2021

 

DECLARACION

 


Muchas cosas un hombre puede hablarle a una mujer, contarles vivencias perdidas de su propia vida, mentirle de cualidades falsas o proyectos imposibles, para construir ilusiones que jamás se concretarán. Lo que sí estoy seguro, que todo lo que vos puedas creerme o quieras aceptar, es lo que yo tengo en mi mente, es lo que siento en mi corazón y grita mi alma.

Olvidarte muchas veces se  cruzó por mi mente, pero es más difícil que encontrar el sol en una noche de estrellas, siento soledad al pensar que no te puedo escuchar y no te puedo observar, saber de ti a cada momento, donde estás o cómo estás. Sentir la necesidad de encontrar en la madrugada tu cuerpo junto al mío, oler tu piel de mujer amada y sacudir mis lágrimas por imaginar el placer de haberte amado con locura. Locuras de amor que se posaron en tu belleza jugando como un niño atormentado por el deseo de lo prohibido, sin importar cuales son nuestras culpas y flotar entre perfumes de hermosos rosales, amarte como te amo,  no es tu culpa la que  lastima, sino la pasión que encuentro en ti cuando me miras.

Cuánto hay  de vos que me deja  inquieto, cuanto necesito de vos que no lo merezco, pero todo eso que parece tuyo,  sin saber lo que has logrado, creaste en mí una realidad de un amor imposible y prohibido, de un sentimiento loco pero puro, de un deseo incomprendido pero sincero. Quisiera que nunca estés triste, que las lágrimas ya no  mojen tus ojos hermosos, que tus carnosos labios estén siempre sonrientes y  tu alegre  mirada, reciban con agrado una flor de mi mano.

Desearía regalarte la luna, el sol, las estrellas, y hagas de ellos tu propio universo,  así podrás sacar de ti lo mejor de tus sueños.

Sin querer  sos la culpable de lo que causaste en mí, un  hermoso estado emocional que hace de mí, un ser vivo y cruel,  al tener en mi mente esa hermosa mujer, bella criatura, tierna y apreciada figura que llegó a mí para no poder  irse jamás.

Quiero regalarte algo de mí, aunque no llegue a ti,  daré todo por ti si todo es para  ti, dejaría todo por vos, si la miseria y la soledad  fuese tu amor, porque te llevo en mi piel como un dulce perfume impregnado en mi alma,  todo lo que siento, todo lo que pienso,  todo lo que tengo es poco para tanta grandeza, para tanta belleza. Y esto es poco pero todo... todo... es por vos. Nunca imaginé que este amor que siento, este amor que desborda mi forma de ser, este amor que no me deja tener orgullo ni sentir la humillación, este amor que me enceguece hasta hacerme un ser lisiado, no lo pueda compartir contigo.

No tienes culpa de nada ni por nadie, tu única culpa es existir, estar en algún lugar del mundo, respirar, reír, llorar, hablar y lo más hermoso de todo, amar.

Aunque no lo creas, no lo quieras, no lo sientas, todo lo que tengo, todo lo que siento es simplemente AMOR PARA MI AMOR...

 

                                               Orlando Mario Soverchia- YoAmor

 

DESOLACIÓN

 


Juega el destino con su desmesurada hipocresía.

Vierte en mí toda su ira de enojo y venganza.

Me discrimina en su trayecto, dejándome avergonzado.

Pido tiempo de tranquilidad al tiempo inmaduro.

Niego mis desconsuelos, busco motivos para tenerlos.

Caprichosa costumbre de no sentirme liberado.

Siempre creo tener la apariencia justa y nada es lo que es.

Si fuera la justicia quien me equilibraría, ya me enjuicio.

Ponerme de rodillas podría mejorar mis sentidos,

Nada importaría si así los hallara.

Donde estará el que me juzga… ¡donde…! Que se manifieste.

Que hago de mí, si siempre están los que no están.

Me lastima la nostalgia y sin embargo voy a ella.

Deseos de unos pocos y necesidades de otros

Son los que me acercan su literatura de vida,

Pero encuentro vagancia y la simpleza de una solución.

Quiero aprender a vivir para poder seguir viviendo.

Necesito de tantas tonterías que resulta difícil lo que percibo,

Porque no está mi alma habituada, o educada,

En sentirse en armonía, si ya hace tiempo que la desea.

Desorientado, caprichoso, observan mis reflejos.

Necesidad de buscar un consuelo

Para esta desolación manifiesta. 

 

Orlando Mario Soverchia-  YoAmor