¿Habrá llegado el momento?
Quizás algún día o algún tiempo de tu vida te darás cuenta cuanto te
amé; cuanto sentí en mi corazón; en mi alma; en mis pensamientos.
Nunca quise hacerte daño, jamás pensé en humillarte tampoco manosearte
y mucho menos despreciarte.
Cada momento tuyo, lindo o malo fueron para mí todo lo que he tenido en
esos instantes, tiempos que me han hecho reflexionar y madurar, pero también me
han vuelto un tanto tonto, un poco vulgar, inseguro, inestable y también con
mis alegrías entristeciendo.
No quiero discutir más con tu conciencia, ni con tu forma de ser,
solamente necesito tener mi alma en paz, sin miedos, sin dolor, sin censura,
solo estar con mis recuerdos de aquel amor, ese amor que alguna vez y por poco tiempo
creí que me hacía o me haría feliz.
Necesito alejarme de vos sin enojarme ni tener rencores, solo saber que
no estas mas a mi lado por esas cosas raras de la vida, por eso creo que (El
silencio es una despedida de alguien a quien jamás volveremos a ver) la
desconfianza, la mentira, la traición, existe, sí, pero no es lo de todos los
días.
(Lucha para alcanzar todo lo que quieres y encuentra felicidad en todo
lo que haces); siempre dije que (El espíritu busca, pero el corazón es el que
encuentra) y es lo que te estuvo pasando en estos últimos años, no puedo sacar
de vos tus necesidades, o cambiar lo que tu alma decide.
Por favor, quiero que esta carta sea la mejor de todas y la tengas a tu
lado para que sepas y veas cuando lo necesites; que en tu vida alguna vez
alguien te amó con locura y eso en nuestro pasar es muy importante; por eso no
quiero que me llames o te acerques mas, quizás parezca nostálgico, triste o
doloroso, pero mucho peor es engañarnos, maltratarnos, ocultarnos detrás de una
fantasía forzada o de una postura clásica para los demás, pero injuriosa para
nuestras conciencias.
No nos engañemos más; ni vos a mí ni yo a vos, los sabemos lo que yo
siento por vos no es lo mismo lo que vos sentís por mí. Juegos de palabras,
pero vivencias y realidad de una verdad: ¡Realidad que no quisiste ver, pero si
tienes que saber que saber que nunca podremos soñar juntos, ni tener de tu
parte el corazón abierto, despejado, tranquilo para ser amado, tus vaivenes de
tu vida hicieron de él un esclavo de los fracasos y desilusiones, de tus
llantos y pocas alegrías, de los desprecios e ignorancias de los que no te
conocen...!
¡Cómo me gustaría amarte y me pudieras amar!... ¡Como me gustaría
cuidarte y me pudieras cuidar!... pero mucho más sentir que tus sentimientos y
los míos jamás se pudieron ensuciar.
Cosa que nunca pudiste lograr, ni nunca entendí el porque, quizás
porque nunca quise entender que tu amor por mí nunca lo fue.
A dios le pido que te dé fuerzas para que cumplas lo que te pido y
también para que yo pueda tener lo que yo aspiro; cosas simples y nobles
solamente poder amar y ser amado.
Un beso inmenso y puro, como triste y perdido, pero si todo lo vivido
fue para mí, los más sentido.
Adiós, mi gran amor, adiós mi gran ilusión, de alguien que jamás
olvidará tu pasión. Porque he bebido de tus sueños y he vivido con tus pecados.
Orlando
Mario Soverchia- YoAmor