viernes, 29 de mayo de 2015



                     MOMENTOS QUE FUERON

Caminando  en mi habitación de un lado a otro, buscando un lugar donde reposar mi cuerpo cansado, encontré mi sillón hamaca, recosté mi cabeza en el rígido mimbre, mis manos transpiradas y apretadas, me decían que mi estado no era el mejor, dirigí la mirada hacia la amplia ventana, donde la claridad me hacía pestañar más de lo normal, fije mis ojos a ningún lado o un horizonte imaginario, solo era tener fija mi cabeza, mecerme muy suavemente, y dejé que todo llegue a mí, y que eran? ¡Tantos recuerdos!... me hice pequeño, jugaba con mi inocente infancia, mi rostro manifestaba ligeramente una gesto de sonrisa, travesuras, juegos, regalos, familiares  que se reunían para festejar algún evento donde todo era un gran y especial momento, el molesto transitar por la escuela primaria, también me presentaba a mis compañeros de mesa, miedos, retos, celebraciones de gala para conmemorar fechas patrias, actuaciones con timidez, nos hacían orgulloso paseando entre la gente vestidos con el traje que nos disfrazaron,  la gran libertad de los sentimientos que no estaban exigidos me hacían feliz, el instante en ese lugar, pasaba y también mis días en los recuerdos, la adolescencia se acercó, me mostró cuadros de tantos momentos vividos, risas, peleas de un joven amor, picardías de amigos, rebeldía ante todo lo que la vida se interponía, pero éramos los dueño del mundo color de rosa, ropa a la moda cada fin de semana, amigos que nos encontrábamos en algún bar de la ciudad y solo era planear el día con la noche en lugares distinto, para encontrar la jovencita que nos pudiera gustar. Llegaron los amores donde el corazón es mas exigido, encontrándome con obstáculos que asomaban por donde pudiese filtrar, las tristezas de retener ese amor, superaba lo real, casi una historia novelesca, pasó  un tiempo de vaivenes golpeando los sentimientos hasta sentir el derecho de hacer con   ese amor lo que debía. Todo te transformó en un nuevo mundo, un nuevo sentido de la vida, responsabilidades aparecían sin que las esperábamos, como el mejor de los amores, frutos del amor retoños increíbles con locuras y delirios indescriptibles, hacían la vida alborotada, pero era la felicidad de ese amor que me acompañaba. Al instante de sentir mis ojos mojados de alegrías y recuerdos hermosos, mi rostro paralizo los músculos de mis facciones y mi frente se transformó en un marcado fruncido de piel, tropecé con las miserias que existían en mí, estupidez, fragilidad de hombre, excusas burdas de sentir que todo se podía hacer con mi vida y la de mis amores, partí en dos el corazón, me sentí dominador de todo lo referido a las pasiones y las acciones, fue que sentí un escalofrío, sensación de soledad, intenté reacomodarme nuevamente, abriendo y serrando las manos como enojado por el camino que había recorrido, quise alejarme de la escena cruel para mi alma, pero de repente se abalanzó sobre mi memoria, tragedias invisibles de lo que había dejado abandonado, inmortalizado los hechos crueles, la vergüenza me baño todo mi cuerpo, sentí mi rostro sonrojado , mi boca se secó, mi garganta se serraba, mis labios se superponían uno con otro mientras mis ojos ya no veían por sentir lágrimas deslizándose sobre los pómulos, lleve mis palmas para secarlas, no quería sentirme así, pero golpeaba mi pecho mi propio reproche, porque fue donde me había dado cuenta que había cortado mi vida en un antes y un después, donde había paso el tiempo y nada había visto de todo lo construido y todo lo destruido. No se la razón que de un salto del pasado, me rencontré nuevamente en esa habitación, recorrí con la mirada extraviada y sensible, regrese de las dos vidas pasadas, y fue mucho peor a encontrarme, que parte de mi pasado había cambiado, poco podía participar de todo aquello, fatigado por el viaje de mis sentimientos golpeados, cuando sentí el frío de mi soledad, por aquellos de momentos que fueron.

                                         YoAmor

viernes, 24 de abril de 2015



                                         ABUELOS
Viajando por la enmarañada  vida, me detuve en una parte de ella,  fue el momento que necesité, contarles  a ustedes… mis hijos, cuánto hay de sus vidas formadas por sus abuelos. El tiempo parece tan lejano y tan cerca, que los recuerdos pareciesen que están pasando en este instante. Eran pequeños con diferencia de dos años  uno de otro y ocho con la de su hermana, el trajinar de su mamá y el mío eran tan exigente que ellos sus nonos, entraron en nuestras vidas, como parte de una necesidad derivada a un mismo amor, por suerte de todos nosotros, estaban  para brindar todo para sus nietos, desde muy temprano, las dos abuelas  se hallaban junto a ustedes, los mimaban, les jugaban, luego cada una se los llevaba a sus casas cambiando el día donde tenía que ir uno u el otro, para que tengan el mismo contacto con cada una y contigo mujercita… fue distinto por el solo hecho que tus hermanos ya grandes, tenías un trato muy diferente con ellos, porque eras la bebé mujer, hacían una trilogía, nietos, abuelas y abuelos. Desde muy pequeños a los tres les enseñaron su forma de vida, sus costumbres, sus experiencias, el tiempo que les dedicaban eran  como si fuesen uno más de sus amigos, jugaban a las carta o cualquier juego de mesa, contando cuentos, muñecas, juguetes de nenas, cuando en cualquier momento, se hacían cómplice de las inocentes travesuras, cada deseo de ustedes, para ellos eran una orden, no había tiempo, limite y situación que se interpusiese   al pedido que les demandaban. Cuando nos descuidábamos les habían comprado golosinas, regalos de los que se les podía ocurrir, pero ellos, nada los detenía, eran sus nuevos motivos de vida, casi diría que sobrepasaba al amor de sus propios hijos, era tan grande el sentimiento de ellos hacia ustedes que todo quedaba a segundo plano, comprometidos de mente y corazón, con nuestro pedido de vuestro cuidado, sus problemas de salud y hasta sus propio tiempos, todo quedaba postergado. A medida que iban creciendo, exigían más de sus vidas, tiempos, cuidados, consejos, hasta ser anfitriones de amistades en sus propias casas, pero no les importaba que no tuvieran privacidad, o postergar  compromisos con sus familiares, solo la necesidad de tenerlos consigo y participar de sus alegrías, era motivo para que todo lo dejasen para otra oportunidad. Fueron pasando los años, ustedes crecían y ellos envejecían, ustedes los retaban y ellos obedecían, pero eran felices igual, porque los tenían ocupado para ellos,  sabían que de a poco se alejarían, y por tal razón aceptaban esas condiciones, fueron hombres y mujer, de a poco tenían vida propia e independiente, motivo que sin que ustedes se dieran cuenta, ellos los veían distanciarse, necesitaban más de ustedes, como así también, se fueron dando situaciones, donde ustedes los tenían que ayudar, envejecieron, comulgaron con los sentimientos encontrados de la indiferencia… sin que ustedes se dieran cuenta, que ellos más los necesitaban, porque no había y no hay momento que no pregunten de cada uno de sus nietos. Un abuelo ya ha partido, y los demás están marchitando entre enfermedades y torpeza del tiempo, pero siguen preguntando y preocupados por sus nietos. Ya solo se conforman con la información de lejos, un abuelo todavía, algo de independencia tiene, los otros dos, solo un  pálido reflejo de intenciones  de sus autonomía, descansan obligados en sus asientos dejando que las personas que están a su alrededor dispongan de sus días. Días que le son difíciles, días copiados de la rutina, días que nunca pasan y a la vez, los exigen a su ya lento transitar. Por eso en este párrafo de recuerdos y algo del hoy, les digo que yo también soy abuelo, pero también me he dado cuenta, que sus abuelos que han tenido y tienen, fueron y son mejores abuelos, que lo que soy. Ah!!! … preguntaron por ustedes…      
                                                               Papá

                                                   YoAmor      
 


Se escribe "Tú" y se pronuncia "El amor de mi vida".
Eres el "me encantas" más sincero que he dicho hasta ahora.
 Eres eso que no quiero perder nunca.
Tus ojos parecen decir: ¡Me gustas tanto!
Y mi sonrisa trata de responderte: ¡No podrías hacerme más feliz!
 Cada vez que me sonríes, se borra una tristeza y se ilumina una esperanza en mí.
 Fuiste, eres, y siempre serás, mi más bonita casualidad.
Bésame, pero si llegas a hacerlo... no prometo devolverte tu boca...
Te amo de verdad porque puedo demostrar mi debilidad,
sin que me sirva de eso para afirmar mi fuerza.
Nunca sufro por amor, sufro por desamor, por desencanto, por indiferencia o por una traición,
 pero nunca por amor, el amor no me lastima.
Te amo porque junto el atardecer y el amanecer en una misma y única magia.
Tus labios se ven más bonitos cuando sonríes a dos centímetros de mi boca.
Y besarte fue decirte muchos "te quiero" sin hablar.
Te quiero tanto, que a veces creo que soy más tuyo que mío...
Algunos quieren ser el Sol para iluminarte el día...
yo prefiero ser la Luna y brillar sobre ti en momentos de oscuridad.
Pero yo te amo y no me importa cuánto me duelas.


MENTIRA DE TU REALIDAD

Vives de fantasías y actitudes prohibidas
Contando el presente, con realidades quiméricas
Tus sentimientos son una mentira
Tus palabras son especuladas
Juegas a lo serio de mujer asidua
Con realidades complejas y oscuras
Limpias el pasado de historias nuevas
Pero ensucias sentimientos de condiciones inquietas
Tienes hambre de amor y lastimas al verdadero
Calma tu ansiedad con amores que son ajenos
Eres suave y espinosa, zarandeando tus pasiones
Y dejar limpios tus sentidos remolones
Libres y escabrosos tus pesares
Cuentan tu aciaga vida
Saltan de un lado a otro el corazón y la pasión
Y sentirte en el camino de tu existencia
Débiles tus deseos pero fuerte tu postura
Tú mirada imprecisa y angelical
La desvía ante la verdad
Limpias tus manos fuera de tu alcance
Y secas tus manos sobre tu presa
Cuando eres una mentira de tu realidad

YoAmor

jueves, 19 de marzo de 2015





DULCE MUJER

Cada día al levantar pienso en vos mujer.
Niñita callada miraste asustada
Lo que la vida comenzaba a revelar.
Tuviste miedo de los cuatros costados
Sentiste  miseria de hambre y amor,
Sin entender cual era el cariño sincero
O una malvada propuesta indecente.
Perturbada observaste malicias injustas
Lloraste manoseos perversos sin que
Nadie estuviera a tu lado,
Solo tus lágrimas en el abandono
Llenaban tu cuerpito de cansancio y desecho
Jugueteabas solita en la desesperación
Hablando y peleando en tu propia sombra
Por no entender lo que el destino insinuaba.
Llevaron tu inocencia para todos lados
Tironeaban tu alma de un interés al otro
Sin importarles que la desgarraban
Imploraste amor y un tanto de paz
Pero no te escuchaban más que la conveniencia
Nadie miraba que ibas creciendo
Necesitando atención en tu adolescencia
Solo encontraste horror y tristezas
Creciste peleando en todos los tiempos
Gambeteaste al destino sin saber donde estabas
Jugaste a la vida un tanto apurada
Creyendo que al fin llegarían tus días
Apostaste tus sueños, ilusiones y todas las esperanzas
Pero de nuevo el destino se quedó con tu existencia
Tu figura se fue haciendo belleza
Tu cuerpo se transformó en adulta mujer
Tus ojos claros y hermosos se fueron abriendo
Cuando todos los días queriéndolos cerrar
Para no darte cuenta que no es tu lugar
Gritas tu soledad, buscas armonía
Nadie te escucha y nadie se ofrece
Quisiste entregar tu alma
Para no sentir lo que tanto te falta
Un tanto de amor... una pizca de paz
Solo muy poco y nada tal vez
Y así seguir viendo a mí
DULCE MUJER

YoAmor