DULCE MUJER
Cada día al levantar pienso en
vos mujer.
Niñita callada miraste asustada
Lo que la vida comenzaba a
revelar.
Tuviste miedo de los cuatros
costados
Sentiste miseria de hambre y amor,
Sin entender cual era el cariño
sincero
O una malvada propuesta
indecente.
Perturbada observaste malicias
injustas
Lloraste manoseos perversos sin
que
Nadie estuviera a tu lado,
Solo tus lágrimas en el
abandono
Llenaban tu cuerpito de
cansancio y desecho
Jugueteabas solita en la
desesperación
Hablando y peleando en tu
propia sombra
Por no entender lo que el
destino insinuaba.
Llevaron tu inocencia para
todos lados
Tironeaban tu alma de un
interés al otro
Sin importarles que la
desgarraban
Imploraste amor y un tanto de
paz
Pero no te escuchaban más que
la conveniencia
Nadie miraba que ibas creciendo
Necesitando atención en tu
adolescencia
Solo encontraste horror y
tristezas
Creciste peleando en todos los
tiempos
Gambeteaste al destino sin
saber donde estabas
Jugaste a la vida un tanto
apurada
Creyendo que al fin llegarían
tus días
Apostaste tus sueños, ilusiones
y todas las esperanzas
Pero de nuevo el destino se
quedó con tu existencia
Tu figura se fue haciendo
belleza
Tu cuerpo se transformó en
adulta mujer
Tus ojos claros y hermosos se
fueron abriendo
Cuando todos los días
queriéndolos cerrar
Para no darte cuenta que no es
tu lugar
Gritas tu soledad, buscas
armonía
Nadie te escucha y nadie se
ofrece
Quisiste entregar tu alma
Para no sentir lo que tanto te
falta
Un tanto de amor... una
pizca de paz
Solo muy poco y nada
tal vez
Y así seguir viendo a mí
DULCE MUJER
YoAmor