jueves, 26 de mayo de 2016
Señora mía, si lloras por lo que has hecho por ese amor…es que te va hacer bien, si lloras por estar emocionada, también te va hacer bien, si lloras por los recuerdos, también te va hacer bien, si lloras porque te encuentras desamorada, también te va hacer bien y sabes porque? Porque te darás cuenta que diste todo y no valía la pena por lo que era.
Orlando Mario
Soverchia- YoAmor
ESA MUJER
Mujer bella y delicada en su ser, todo tenía en su vida y
su andar,
Jugaba a su favor todo lo más lindo de su
existencia, derrochaba alegría sin querer,
Sentía su mundo libre para vivir, pero los
sentimientos sin saber porque,
Un día dijeron sentir el llamado de otra
realidad,
Aquel hombre, florecido de un abrir y
cerrar de ojos,
Colmó su alma, extravió su mirada por sentirse
impactada,
Toda en ella se convirtió en una sinfonía
de suspiros,
Quiso hacer su saludo y solo un simple
hola… fue su accionar,
Sintió que era el sentimiento por quien
pensar, juntó fuerzas,
Entregó la sonrisa más hermosa que se pudo
ver
Y le alcanzó para conquistar aquel
caballero andante,
Se sintió una niña en su transitar y mujer en su seducción,
Dedicó los segundos de vida para ese amor,
Todo de ella se concentró en aquella figura
de macho cabrío,
Ese hombre precioso para su gusto, la hacía
sentir mujer,
Cada día que pasaba adoraba los ojos por su
mirada,
Los labios por sus besos, las manos por sus
caricias,
Y su cuerpo, por cuanto le hacía sentir en
su lecho de pasión,
Todo lo entregó sin condición, su corazón
fue sacado de su pecho,
Los pensamientos por él fueron su razón de vida, todo de ella
se hizo él,
Nada ni nadie podrían cambiar ese estado
que llegó a sentir,
Pero nunca imaginó, que todo lo que vivía
todo lo que sentía,
En un instante de aquel segundo falta, ese
caballero andante y hombre fatal,
Le decía que no podría seguir a su lado,
porque otra mujer sin saber porque,
Ya le había conquistado, ese amor que había
tenido por ella.
Todo se hizo gris, todo dejó de existir,
porque la vida ya no valía,
Dejó sus sueños en un rincón, no comía para
no seguir viviendo,
Desaliñada y triste, levantaba ese cuerpo
maltrecho y golpeado,
Miraba su piel desquebrajada, sus ojos
fatigados por no dormir,
Su pelo narraba desorden y su alma abatida por tanto dolor,
Su tiempo en años se habían doblegado, no
quería seguir viviendo,
Las horas detenidas en agonías estúpidas, consumían
su nostálgica belleza,
Cuando los tiempos creídos conquistados,
fueron robados sin pedir permiso.
Por esa mujer.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
miércoles, 25 de mayo de 2016
martes, 24 de mayo de 2016
lunes, 23 de mayo de 2016
domingo, 22 de mayo de 2016
EL MEJOR
AMOR
La decisión más maravillosa en esa pareja,
Había llegado en los dos, de un huevo ser,
Nueve lunas compartieron con una increíble ilusión,
Organizaron sus vidas, los tiempos y su
hogar,
La familia entera, vivían de fiesta con
inquietudes y proyectos,
Y el día había llegado, aquella mamá,
cansada y alegre, gozó su querer,
Sus brazos sostenían, aquel hermoso bebé de
sueños,
Todo igual como lo habían imaginado, como
ya lo sabían,
Su carita angelical apretada a sus pechos y
la necesidad de comer,
Dejaban ver su condición, de un ser
especial, un ser increíble,
Crecía con todos sus sentidos sueltos, sin
contener emociones espontaneas,
Organizaba su mundo con tanta ternura, que
todo era mágico,
Sus ojitos con brillos, su mirada inocente,
sus gestos afectivos
Su bondad expuesta sin condición, sus besos
llenos de pasión,
Sus entrecortadas palabras solo eran de
cariño y amor,
Cada día manifestaba su condición con capacidades
distintas,
Pero ella, era la luna, el sol y las estrellas,
todo en el mismo lugar y al mismo tiempo,
Llena de inocencia, todo lo hacía
maravilloso, que no se podía desatender,
Comenzaba sentirse mujer y sus ingenuos
sentimientos los hacía saber,
Su deseo de un compañero a su corazón, la
hacía graciosa y un tanto jovial,
Feliz e ilusionada, elegía su hombre en donde
depositar todo su ser,
Belleza era su alma, inocencia sus deseos,
puros los sentimientos,
Todos la adoraban, muchos la envidiaban,
por demostrase sin condición,
Jugaban sus sentidos sin condición, palabras
de afectos eran todos sus días,
Cada mañana era un té quiero… a quien la
recibía en sus brazos,
No se podía olvidar, no se debía negar, que
esa niña mujer, es el mejor amor.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
sábado, 21 de mayo de 2016
LAVERINTO DE AMOR
Hola!... como estás, yo acá tratando de
encontrar mis sentidos,
Llega la tarde, luego la noche, y me persiguen
las penurias de cariño,
Te llamé, pero tú no respondías, te mandé
mensajes y no lo leíste,
Busque un motivo, un sentido o quizás una
excusa para no pensar,
Seguí mi momento en silencio, pero no
conseguí la mesura de imaginarte cómo estás,
Volví a mirar mis llamadas, los mensajes y
todo seguía igual,
Empezaron los recuerdos y los momentos de
nuestra dicha, se sentaron a mi lado,
Sonreí tristemente, cabeceando el instante que
estaba ocurriendo,
Imaginé tus tiempos ocupados, sabiendo que
no los tenías, pero solo pensé,
Memoricé diciéndome un te quiero y te
respondía… yo mucho más,
Me llevabas de tu mano a todo lo que
rodeaba tu vida y sonreías muy tiernamente,
Me gustaba saber que yo era él… y me tenías
en tu mente, pero a veces no lo estuve,
Sin darme cuenta, comencé a vivir en tu
pintura de amor, en el retrato de tus expresiones,
En el lienzo de tu belleza, en el canto de
tu voz, en el silencio de tu mirada,
Querida mía, como no me había dado cuenta,
como no entendí tu camino,
Quise hacerte feliz, pero confundí el
pasaje de tu amor y habías empezado a partir,
Yo… yo solo quise todo para ti, protegerte,
saber que tenías lo que tú pidieras,
Te acompañe a tu lado sin preguntar cuál
era tu destino, sin embargo, perdido de pasiones,
Caminé cuadras de esperanzas, troté kilómetros
de ilusiones y viajé días de fantasías,
Sin embargo, no creo haberte encontrado,
esperándome, necesitándome, o peor queriéndome,
Y ahora estoy en un laberinto de
sentimientos, casi diría en un triste laberinto de amor.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
viernes, 20 de mayo de 2016
MUJER
Y TAN SOLO MUJER
Linda y bella mujer, porque dejas que mis
ojos se pierdan en tu figura,
Porque me sueltas de la mano, mientras
juegas con tu cuerpo al no tocar,
Tienes pasión en tu alma, sensualidad en tu
caminar, armonía en tus piernas,
Me miras sonriente, me hablas despacio,
susurras tus gestos de amor,
Tocas mi cara, pronuncias mi nombre, me
pierdo en tus caricias,
Me busco en mi alma, me entierro en los
sueños, te siento en mi pecho,
Mis manos en tu cintura, recorren el vaivén
de tu bailar,
Te sigo mirando, me hechiza tu juego y tu
insolencia me atrapa,
Necesito contener el deseo, procuro pausar
mis súplicas,
Tú cierras los ojos y yo abro más los míos,
Locura y cruel momento, de sentir mis
labios junto a los tuyos,
Ahogo tu nombre en un solo gritar, siento
necesidad de que seas mía,
Porque nadie cambiará mi pensar y ninguno
robará mi sentir,
Que sos mi mujer y tan solo mujer, para que
yo pueda amar.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
miércoles, 18 de mayo de 2016
DESAYUNANDO
UN AMOR
Hoy, en esta
madrugada despertó mi vida el sueño,
Sentí la sensación
tan difícil de explicar, pero muy clara en sentir,
Saque toda mi
existencia de su lado, nuestra cama,
La miré contento, la
miraba triste, la sentí muy lejos,
Preparé nuestro café
de siempre, de nuestro momento de charla,
De espalda a su
figura, sentí los pasos entrecortados, por su despertar,
Miré su belleza,
contemple su pelo, observaba sus ojos, sentí mil deseos,
Sonrió muy amable,
estiró su mano y deje su café, que se lo acerque,
Mi sorbo, fue la
pausa de mi interrogatorio, de dudas que no comprendía,
Pregunté, que le
estaba pasando, respondió muy tranquila… nada solo cansada,
Insistí nuevamente…
te siento distante… te veo muy sería con tus respuestas,
Insegura cuando me
hablas… fastidiosa cuando te beso… molesta de mis caricias,
Movió su cabeza de un
lado a otro sin palabra alguna, mirando su taza,
Volví a mis dudas
preguntando… hay alguien en tu vida!…
Si hay un hombre quien
ocupa tus pensamientos, o un amor que me aleja de ti,
Te pido simplemente,
no lo ocultes, no importa la realidad,
Resistió el sorbo, cerró
los ojos y cuando lo volvió abrir…
Lágrimas sin
entender, regaban su cara, brillaban entre sacudidas,
Miró fijamente sus
manos temblorosas, yo no lo había notado,
Sentí miedo y angustia,
saboree el engaño confeso, resigné mi dolor,
Cuando una vos
entrecortada y abandonada, llenaron mis oídos de no entender,
Te digo que sí, hay
otro amor, imposible de que lo cambie, no quiero que eso pase,
En un instante
imagine su figura de hombre bello imposible de alcanzar,
Los imaginé juntos en
un lecho de amor, perdidos y lujuriosos,
Tuve la pintura de
dos cuerpos desnudos retorcidos del placer,
Cuando solo fue mi
intento en preguntar, que fue lo que te ha dado él,
Y como nunca imaginé escuchar,
de aquella esplendida mujer,
Que ese amor, que
tenía en su corazón y que nunca dejaría de amar,
Fue el desayuno de un
amor, por una mujer.
Orlando Mario
Soverchia- YoAmor
martes, 17 de mayo de 2016
lunes, 16 de mayo de 2016
EL PRECIO
POR UN AMOR
Llegué a tu vida, sin saber que era lo que me
ofrecía,
Acumulé ilusiones, proyectos y un tanto de paz,
Conocí tu figura, acepté esa pintura que el
momento mostró,
Todo parecía interesante y quise pensar,
Mis ojos contaron en una realidad en quien mirar,
Acerqué mi cariño y el tuyo con mucho criterio,
Ofrecí mis sentidos y escuchaste mi oferta,
Interesado en tu ser, quise poner precio a mi
vida,
Ofreciste lo justo y yo toda en ello,
Hipotequé los sentidos y de tu lado, solo un
simple tal vez,
Vendí mi persona sin valía, para poder estar a tu
lado,
Regalé la propiedad de mi conciencia, y tú tan
solo los gestos,
Pagué un valor sin precio, sin que lo hayas retribuido,
Mis lágrimas se devaluaron, cuando a ti no te
importaban,
Las palabras no existieron, porque nada estaba
firmado,
Corrí a la justicia divina y ya, nada se podía
hacer,
Golpee las puertas de tu alma y solo el silencio
de la ausencia,
El abogado de mi juicio, ya se había retirado,
Entonces me di cuenta, que en tan solo un instante
de mi vida,
Ha sido muy alto, el precio por un amor.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
viernes, 13 de mayo de 2016
Hermosa mía, sabes una cosa? estuve pensando que haría si no te tuviera… y me di cuenta que eres mi otra mitad, mi locura de alegría, mi ternura que me falta, mis sentidos cuando duermen, mi esperanza de cada día, y lo más lindo de todo, que cada noche cuando me acuesto, estoy alegre porque al día siguientes estas a mi lado.
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
Estoy parado en el medio de la noche, estoy pensando que fue de mí, que quise hacer con todo lo que me rodeaba, me estoy buscando, porque mañana tengo que seguir, necesito encontrarme y contarme todo lo que hice mal, pero no sé porque estoy sin pensamientos alegres como se dice siempre, triste, pero me llamo a la reflexión, sacudo mi cabeza, miro hacia la puerta, miro lo que tengo, y salgo en busca de una revancha.
Orlando Mario
Soverchia- YoAmor
Buenas noches, mi amor, buenos sueños, yo te tengo en mis
sueños, por lo que creo que me tendrás en los tuyos, pero no me digas nada por
lo que sueño, porque en definitiva sueños son… Solo quiero soñar que te estoy
amando, porque cuando te amo, estoy soñando con un amor verdadero.
Orlando
Mario Soverchia- YoAmor
martes, 10 de mayo de 2016
USTED AMIGA
Mi señora amiga le digo que usted es mi
imaginación,
Lo ha logrado sin decirme nada, solo por
haberla visto
Dejaré pasar este sentimiento, porque no
quiero molestarla,
No sé si usted está sin compañía, o alguien
que la quiera,
Lo único le digo, que me asusta su figura,
Me tiemblan las piernas, no quiero
fastidiarla,
No puedo dejarla de mirar, ni tampoco de
estudiar,
Pero le comunico señora amiga,
Que ha llegado a mí, muy de repente
Y que usted es mi conciencia más bonita,
Y usted sabe quién es…
Orlando Mario Soverchia- YoAmor
Suscribirse a:
Entradas
(
Atom
)